jueves, 23 de octubre de 2008

El policía local detenido por narcotráfico fue guardaespaldas de Fabra

Levante-EMV, Castelló
El agente de la Policía Local de Castelló detenido por su presunta relación con una red de tráfico de drogas es L. S. B., ex guardaespaldas y familiar del presidente de la diputación, Carlos Fabra. Fuentes policiales confirmaron la identidad del arrestado, que ayer se encontraba en los calabozos de la Comisaría de Castelló, a la espera de pasar a disposición judicial.Según fuentes consultadas, el detenido ingresó hace más de una década en la plantilla de la Policía Local y forma parte de una de las primeras promociones. El pasado 20 de octubre de 2006, la junta de gobierno local del ayuntamiento de la capital acordó conceder la excedencia voluntaria a L.S.B., que se hizo efectiva el 15 de noviembre del mismo año. El permiso fue para un mínimo de dos años continuados, según el acta de la reunión consultada por este diario. Por lo tanto, podía pedir la reincorporación a partir de mediados del mes que viene.El agente estuvo adscrito a la división de servicios especiales de la Policía Local, de la que depende el grupo de escoltas para protección de autoridades. En los últimos años fue uno de los guardaespaldas habituales de Carlos Fabra, del que es sobrino segundo. La estampa imponente del policía acompañó al líder provincial del PP (que tiene derecho a escolta por ser concejal de Castelló) a declarar a los juzgados de Nules, como refleja la foto de mediados de 2006.Sin embargo, hace dos años Serrano decidió interrumpir su actividad profesional para embarcarse en negocios personales. Según compañeros de profesión, ingresó una cantidad importante de dinero gracias a la recalificación de un terreno. Las mismas fuentes explican que viajaba habitualmente a Sudamérica y que en Brasil abrió un gimnasio. Y es que el policía era un apasionado del deporte y practicaba boxeo y remo, entre otras actividades. Sus compañeros lo recuerdan como una persona que se relacionaba poco y que cuando salía a la calle era muy eficaz, gracias a su intimidatorio aspecto físico. "Imponía mucho respeto", recuerdan. Antes de formar parte del cuerpo de escoltas, trabajó en atestados.También eran conocedores sus colegas del vínculo familiar del agente con Carlos Fabra. "Sabíamos que estaba muy bien relacionado", apuntan. De hecho, el cargo de escolta es codiciado en el cuerpo policial por la comodidad ( aunque no exento de riesgos), según dicen. La detención de Luis Serrano y su posible implicación en una red de narcotráfico -que disponía de laboratorios clandestinos de cocaína en Castelló- ha causado gran sorpresa en la Policía Local, ya que el agente tenía fama de disfrutar de una holgada situación económica.