martes, 28 de octubre de 2008

Hacienda investiga 130 cheques con los que se abonaron 2,5 millones en cuentas de Fabra

LAS PROVINCIAS
Los dos peritos judiciales encargados de estudiar las cuentas del presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, han empezado ya a analizar los "soportes documentales de los ingresos por cheque" realizados en las cuentas del líder del PP provincial o en los de sus más allegados -su esposa, sus hijos, la cuenta de su asesoría Carmacas y la empresa fitosanitaria que cofundó su esposa, Artemis 2.000-. Unos cheques que se abonaron entre 1999 y el año 2004 y que, según fuentes de la investigación, suman un total de 2,5 millones de euros.
Ahora, ambos expertos fiscales, Conrado Caviro y Javier Rubio, tratarán de determinar el origen de dichos movimientos y procederán a la "identificación de las personas que solicitaron su emisión o de los titulares de las cuentas contra los que se libraron", según consta en los autos del juzgado de Nules en los que se ordenaba a 23 entidades financieras de distintas provincias facilitar a la Fiscalía dicha documentación contable.
De hecho, los agentes que hace casi un mes se personaron en estos bancos, principalmente de la provincia de Castellón, identificaron, además de a los titulares e intervinientes en las operaciones bancarias, a los propios contables de la entidad, por si se producía alguna coincidencia sospechosa.
Así, además de rastrear la procedencia los casi dos millones de euros -1.957.000- que se abonaron en cerca de 250 ingresos en efectivo en las cuentas de las mismas cinco personas, los dos contables han iniciado ya las pesquisas para determinar el origen de otros casi 130 depósitos más realizados en cheque. Entre efectivo y cheques suman alrededor de 380 abonos y 4,5 millones de euros.
Entre los ingresos más elevados figura uno de hasta 240.000 euros en noviembre del 2004, al parecer derivados de la venta de un inmueble, aunque también hay otros abonos en cheque de 20.000 euros; 24.000; 36.000; 60.000 y 111.692 euros en diferentes fechas y cuyo origen también tratan de determinar los expertos de Hacienda.
El objetivo de todas estas diligencias y pesquisas contables es esclarecer si Fabra formó parte de una trama para agilizar productos fitosanitarios ante los ministerios en la época del presidente José María Aznar y cobró por ello, tal como asegura el gerente de Naranjax, Vicente Vilar, ahora en prisión.
El líder de los populares castellonenses, que figura como imputado por supuestos delitos contra la Administración Pública, falsedad documental y presunto fraude fiscal en el ejercicio de 1999, ha venido insistiendo en que de sus actas de Hacienda y las de su mujer no se deriva ningún delito fiscal, por lo que denunció que los únicos que le acusan son los partidos de la oposición.
Con todo, los peritos de Hacienda pretenden aclarar si gracias a esas gestiones Fabra se enriqueció. Por ello, tal como determinó la Audiencia Provincial, la juez instructora del denominado caso Fabra ordenó investigar no sólo las cuentas del político popular --que es titular de 19 y cotitular de 94, algunas de ellas por razón de sus cargos públicos-, sino la de su familia directa, esposa e hijos, y sus empresas.
Lotería
Claro está, entre los cheques cuya procedencia han querido investigar los peritos judiciales adscritos a la investigación también figuran los ingresos derivados de los premios de la lotería. El presidente de la Diputación de Castellón ingresó tres el 11 de octubre del año 2000: uno por valor de 1.150.712 de las antiguas pesetas, otro por 16.330.323 pesetas y otro de 602.457 pesetas. Cabe recordar que Fabra volvió a ganar un premio de lotería las pasadas navidades.
La investigación comenzó en 2003, hace ya cinco años, y las diversas causas que se instruyen están adscritas a los juzgados de instrucción número 1 y 2 de Nules. Todas ellas están en fase previa, o de instrucción, y sus avances son muy lentos a causa de los continuos cambios de jueces y fiscales y la falta de personal. El origen de la investigación deriva de las querellas presentadas por el empresario Vicente Vilar contra el presidente de la Diputación.

jueves, 23 de octubre de 2008

El policía local detenido por narcotráfico fue guardaespaldas de Fabra

Levante-EMV, Castelló
El agente de la Policía Local de Castelló detenido por su presunta relación con una red de tráfico de drogas es L. S. B., ex guardaespaldas y familiar del presidente de la diputación, Carlos Fabra. Fuentes policiales confirmaron la identidad del arrestado, que ayer se encontraba en los calabozos de la Comisaría de Castelló, a la espera de pasar a disposición judicial.Según fuentes consultadas, el detenido ingresó hace más de una década en la plantilla de la Policía Local y forma parte de una de las primeras promociones. El pasado 20 de octubre de 2006, la junta de gobierno local del ayuntamiento de la capital acordó conceder la excedencia voluntaria a L.S.B., que se hizo efectiva el 15 de noviembre del mismo año. El permiso fue para un mínimo de dos años continuados, según el acta de la reunión consultada por este diario. Por lo tanto, podía pedir la reincorporación a partir de mediados del mes que viene.El agente estuvo adscrito a la división de servicios especiales de la Policía Local, de la que depende el grupo de escoltas para protección de autoridades. En los últimos años fue uno de los guardaespaldas habituales de Carlos Fabra, del que es sobrino segundo. La estampa imponente del policía acompañó al líder provincial del PP (que tiene derecho a escolta por ser concejal de Castelló) a declarar a los juzgados de Nules, como refleja la foto de mediados de 2006.Sin embargo, hace dos años Serrano decidió interrumpir su actividad profesional para embarcarse en negocios personales. Según compañeros de profesión, ingresó una cantidad importante de dinero gracias a la recalificación de un terreno. Las mismas fuentes explican que viajaba habitualmente a Sudamérica y que en Brasil abrió un gimnasio. Y es que el policía era un apasionado del deporte y practicaba boxeo y remo, entre otras actividades. Sus compañeros lo recuerdan como una persona que se relacionaba poco y que cuando salía a la calle era muy eficaz, gracias a su intimidatorio aspecto físico. "Imponía mucho respeto", recuerdan. Antes de formar parte del cuerpo de escoltas, trabajó en atestados.También eran conocedores sus colegas del vínculo familiar del agente con Carlos Fabra. "Sabíamos que estaba muy bien relacionado", apuntan. De hecho, el cargo de escolta es codiciado en el cuerpo policial por la comodidad ( aunque no exento de riesgos), según dicen. La detención de Luis Serrano y su posible implicación en una red de narcotráfico -que disponía de laboratorios clandestinos de cocaína en Castelló- ha causado gran sorpresa en la Policía Local, ya que el agente tenía fama de disfrutar de una holgada situación económica.

lunes, 20 de octubre de 2008

Rajoy vuelve a fotografiarse con Fabra, imputado por varios delitos de corrupción

El encuentro entre Rajoy y Fabra llegó un día después de que el Partido Popular arropara al mandatario, incluyendo en el Congreso una ponencia que asegurabaue sólo se procederá a “la suspensión automática de funciones y militancia cuando existiese una condena firme en un procedimiento penal por la comisión de un delito doloso”, según informó el diario El País el sábado pasado.
El partido ha blindado a Fabra
Esta especificación no sólo asegura a Fabra –investigado por la Fiscalía Anticorrupción, que ya ha encontrado seis millones de euros sin justificar en una veintena de cuentas suyas- la plenitud de derechos en el cónclave popular: beneficia también a otros altos cargos salpicados por escándalos de urbanísticos, de corrupción o de malversación de fondos, como el alcalde Torrevieja, Pedro Hernández Mateo, el ex regidor de Alicante y diputado, Luis Díaz Alperi, y el ex alcalde de Burriana y también diputado, Alfonso Ferrado.

lunes, 13 de octubre de 2008

Fabra dice sólo aclarará en tribunales cuestiones relativas a su patrimonio

TERRA
Fabra ha respondido así, a preguntas de los periodistas, al delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, quien esta mañana ha pedido al PP que distinga entre una responsabilidad judicial y una responsabilidad política y ha remarcado que Fabra no ha aclarado la procedencia de su patrimonio.'Cuando tenga que aclararlo ya lo aclararé ante quien lo tenga que aclarar, desde luego no ante el delegado del gobierno', ha declarado el también presidente regional del PP.Fabra ha pedido además a Peralta que sea 'consecuente' con la responsabilidad que ostenta y que deje que las instituciones funcionen 'separadamente, y no como un guirigay o un tututuruglutu que les interesa políticamente'.'Sobre lo demás, como para mi carecen de interés sus manifestaciones sobre mí, lógicamente no voy a hacer ningún comentario', ha finalizado Fabra.

jueves, 9 de octubre de 2008

Uno de cada dos valencianos cree que Carlos Fabra debe dimitir. EL PAIS

Uno de cada dos valencianos (46%) piensa que Carlos Fabra debería dimitir como presidente de la Diputación de Castellón. Esta es la opinión que manifiesta la mayoría de los encuestados por el instituto Metroscopia. Tan sólo un 8% se muestra partidario de que Carlos Fabra continúe al frente de sus responsabilidades pese a estar imputado en varios delitos contra la Administración pública y delito fiscal.
La opinión de que Fabra debería dimitir es mayoritaria, incluso entre los votantes del PP, que cuestionan también el apoyo que ofrece el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, al responsable de la Diputación y del Partido Popular en la provincia de Castellón.
Así, un 44% de los entrevistados manifiesta no estar de acuerdo con el apoyo de Camps a Fabra, frente a sólo un 10% que está conforme con el respaldo del jefe del Consell al presidente de la Diputación de Castellón. El conocimiento del caso Fabra por parte de la opinión pública es muy importante, ya que un 63% de los encuestados había oído hablar del mismo antes de realizarse el sondeo. La encuesta revela que, aunque el conocimiento de la situación del presidente del PP de Castellón es mayor entre los votantes socialistas, al menos seis de cada diez votantes populares también sabe de la situación de Carlos Fabra.
Probablemente estas opiniones pesan en la valoración que obtiene el presidente de la Diputación de Castellón, que logra un 3. La nota más baja de todos los políticos sobre los que se ha interrogado a los encuestados y el cuarto más conocido de todos por los que se ha preguntado.
El estudio demoscópico realizado por Metroscopia también interroga por el reciente congreso del PSPV, celebrado el pasado 27 de septiembre. Un acontecimiento que era conocido por la mayoría de los valencianos (56% frente al 44% que desconocía que se hubiese producido). Sin embargo, una abrumadora mayoría (84%) desconoce el nombre del nuevo secretario general, Jorge Alarte. El desconocimiento sobre el flamante líder del socialismo valenciano se traduce en que un 73% de los valencianos no sabe opinar sobre el acierto o no de la elección o en que el 43% ignora si el PSPV tiene ahora más posibilidades de ganar en las próximas elecciones autonómicas.
De los que sí se pronuncian, un 20% cree acertada la elección de Alarte, frente al 7% que opina lo contrario. Respecto a si el PSPV tiene más posibilidades de ganar con el liderazgo de Alarte, el 33% de los valencianos piensa que las mismas, el 16% que más y el 7% que menos. Más descorazonadora para los socialistas son las respuestas acerca de la división interna del PSPV tras la elección de Alarte. Un 49% de los valencianos no se atreve a pronunciarse, un 33% piensa que se mantendrá la división interna y tan sólo un 12% considera la elección del nuevo secretario general del PSPV como un "punto final".
Entre los votantes socialistas también son mayoría los que piensan que se mantendrá la división interna pese al nombramiento de Alarte (32%) frente a los que creen que los enfrentamientos ya han llegado a su fin (22%).
El estudio demoscópico también analiza el grado de conocimiento y valoración de los políticos valencianos. Sólo cuatro de ellos son conocidos por más de la mitad de los valencianos: la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá (93%); la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega (87%), la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Valencia, Carmen Alborch (76%) y el citado presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra (50%).
Rita Barberá sigue siendo, un año más, la líder más conocida y mejor valorada. En esta ocasión con un 6,5 y ello pese a que los votantes socialistas no le dan el aprobado (4,7). A Barberá la sigue en valoración la jefa de la oposición municipal Carmen Alborch con un 5,8. La vicepresidenta del Gobierno logra superar el aprobado con un 5,5.
Tras este grupo de notables se colocan el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, con un nivel de conocimiento del 47% y una calificación del 5,7. La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, se coloca muy cerca en conocimiento con un 45% y una nota de 5,3.
La nueva alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, es muy poco conocida (14%), aunque bien valorada con un 5,8. El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, con un conocimiento del 42% es uno de los pocos que no logra aprobar y se queda con un 4. En la izquierda, la portavoz de Compromís en las Cortes, Mónica Oltra, logra un 5,3 con un conocimiento del 14%; mientras que la líder de Esquerra Unida, Glòria Marcos, con un conocimiento del 33% suspende con 4,5 puntos.

miércoles, 8 de octubre de 2008

El PP veta investigar el posible inflado del kilometraje de la diputada Esther Pallardó LEVANTE-EMV

El PP vetó ayer en las Corts Valencianes una iniciativa de Compromís en la que pedía una auditoría de la Sindicatura de Comptes a la diputación, después de que este diario destapase el caso del posible inflado del kilometraje de la diputada provincial Esther Pallardó.
La parlamentaria del Compromís Marina Albiol, impulsora de la proposición no de ley, manifestó que se trata de "un caso muy grave", ya que se ha hecho "un mal uso del dinero público" por parte de una representante pública. El PSOE votó a favor de la auditoría para "aportar luz sobre una institución bajo sospecha permanente", según manifestó la diputada Pepa Andrés. "Un tema como el de Pallardó no pasaría de anecdótico y fácilmente solucionable si la credibilidad de esta institución no hubiera sido puesta en duda por su presidente en multitud de ocasiones", añadió.
Por su parte, el diputado del PP José Marí dijo que las cuentas de la diputación son analizadas por órganos internos que están formados por funcionarios del Estado y realizan su trabajo con "las máximas garantías". Añadió que el problema de la oposición es que "no encuentra a nadie que pueda ganar unas elecciones" a Fabra. Asimismo, aseguró que está "muy lejos de las preocupaciones del grupo parlamentario popular tratar sobre los problemas que pueda haber con las dietas por kilometraje de una diputada provincial" y señaló que ésa "no es la función de las Corts, ni en pleno ni en comisión".
55 kilómetros
Como destapó este diario, Esther Pallardó venía cobrando a la diputación 55 kilómetros por cada desplazamiento de ida y vuelta entre Burriana y Castelló, cuando la distancia es la mitad. Por este concepto ingresó en enero, febrero y marzo de este año 188,10 euros mensuales. El presidente Carlos Fabra trató de exculpar por escrito a la diputada y justificó que Pallardó circula con su coche por la autovía de la Plana, un itinerario sorprendente, ya que es mucho más corto discurrir por la CV-18 o la N-340. Fabra descargó la responsabilidad en el jefe del parque móvil, quien, según dijo, fue quien determinó la cifra de kilómetros que debía pasar al cobro por sus viajes.
Pese a estas justificaciones, la diputada del PP y concejala en Burriana corrigió en mayo el kilometraje y lo recortó en un 45%. De los 188,10 euros que cargaba a las arcas provinciales pasó a facturar 102,60 euros.

domingo, 5 de octubre de 2008

REPORTAJE: FABRA -- AQUI MANDO YO

EL PAIS
Carlos Fabra toma el micrófono con gesto serio. La audiencia irrumpe en un murmullo de entusiasmo. Ha llegado el momento. Va a comenzar uno de esos actos en los que se muestra más auténtico. Viste traje y corbata sobre el improvisado escenario. Deja transcurrir unos segundos. Se hace el silencio a su alrededor. Se concentra. Da unos pasos muy breves. Inclina la cabeza ceremonioso. Las gafas oscuras, que forman parte indisoluble de su rostro desde la adolescencia para ocultar la pérdida de un ojo después de que su hermano le clavara de forma fortuita unas tijeras, ocultan su mirada. En ese instante emocional, ciertas cosas quedan aparcadas. Carlos Fabra es otro. No es el hombre todopoderoso en la ciudad, ni el político acosado por una causa judicial que dura cinco años en el juzgado de Nules, por donde han pasado ya ocho mujeres jueces, a pesar de lo cual sigue pendiente de justificar, entre otras cosas, qué ha pasado con cerca de seis millones de euros que Fabra ingresó entre los años 1999 y 2004.
Suena la melodía.
Carlos Fabra arranca la primera estrofa:
-Milli violíni suonate dal vento... tutti colore del arco valeno... vanno a fermare... una pioggia d'argento...
Carlos Fabra entona Ciao, ciao, bambina en un perfecto italiano. Adora la canción italiana de los años setenta y a sus intérpretes, Domenico Modugno, Gianni Morandi, Nicola di Bari... Cuando está entre los suyos, canta. Entre los suyos no es Carlos Fabra. Es Charly. Fuera de su recinto privado es Don Carlos. O el Presidente.
El aplauso está asegurado. No es bueno contrariar a Don Carlos en Castellón.
Si nos guiáramos por el habla popular, cabría deducir que Castellón es la única provincia española que cuenta con un presidente. Porque todo el mundo sabe en la capital o en cualquiera de sus 135 pueblos quién es aquel a quien todo el mundo llama "Presidente". Sólo hay uno. Carlos Fabra.
Fabra no es alcalde. No es el presidente de la Generalitat. No es ni siquiera consejero. Nunca ha sido cabeza de lista en ningún proceso electoral. Ni ha sido ministro aunque mucha gente sostenga que pudo haberlo sido de haber querido. Fabra es el presidente de la Diputación, un cargo de rango secundario en cualquier provincia española, salvo en Castellón. Subsidiariamente es, además, presidente del Partido Popular en la provincia, el partido que domina tres cuartas partes de los puestos institucionales. Sin embargo, nadie lo duda: quien manda en Castellón es Carlos Fabra.
Su vocación política viene de familia. Es el quinto en la línea de sucesión de una dinastía de presidentes de Diputación y alcaldes. Lo fueron, desde Victorino Fabra Gil (que ocupó dicho cargo entre 1874 y 1892) hasta su padre, Carlos. Padre, abuelo, bisabuelo y tío-tatarabuelo, la familia Fabra está emparentada con el poder. La estirpe no se ha interrumpido: su hija Andrea (38 años) consiguió su acta de diputada del Partido Popular en las pasadas elecciones generales como número dos en las listas por Castellón, tras el ex ministro Juan Costa.
Pero la tradición familiar es una cosa y el ejercicio del poder es otra, y nadie ha llegado a parecer tan poderoso como él dentro de la provincia. Incluso sus más allegados aceptan que sus formas de actuar son las propias de un cacique. Su clientelismo se ha fraguado a lo largo de un sistema de concesión de pequeños favores y de un conocimiento muy preciso del ordenamiento territorial de Castellón, plagado de pequeños municipios donde sólo ocho ciudades superan los 20.000 habitantes (88 pueblos tienen menos de mil). "Su padre, a quien también llamaban Don Carlos, hizo parte del trabajo durante los últimos años del franquismo. Por entonces, era usual que todo pequeño alcalde se desplazara a la capital a pedir un favor de Don Carlos. Era el paso necesario para solucionar pequeños problemas", dice un ex alcalde.
Esa política de cercanía la entendió muy bien su sucesor. Ese "habla con Don Carlos" se ha convertido en una fórmula a partir de la cual ha ido consolidando su poder. Los pequeños favores han llegado a extremos muy personales, desde un puesto de trabajo (entre sus 35 asesores en la Diputación hay ex alcaldes, primos, hijos, hermanos de cargos de la provincia, sin considerar empleos en sociedades públicas, patronatos y concesiones) hasta una subvención, pasando por un trato exquisito en el Hospital Provincial, dependiente de la Diputación. "Mi madre se encontraba muy enferma y llamé a Don Carlos. Me dijo que no me preocupara y a los dos días estaba ingresada en una habitación para ella sola", cuenta una ciudadana. "Ése es el tipo de favor menor que angustia mucho a la familia y produce una enorme gratitud", explica un político de la oposición.
Carlos Fabra se convierte así en el Gran Conseguidor que todo lo puede: el pequeño favor para el modesto ciudadano y la recalificación multimillonaria para el empresario, el puesto de trabajo por un lado y un aeropuerto para Castellón por el otro. Todo el mundo da por sentado en la provincia que cualquier asociación ciudadana va a contar siempre con una pequeña subvención de la Diputación. Por modesta que sea: para impulsar la Denominación de Origen "Alcachofa de Benicarló", para proyectos de la Asociación Rumana de Castellón, Valencia y Alicante, para el Conservatorio Profesional de Música del Alto Palancia, clubes de fútbol, tenistas, golfistas y pilotos de rallies, la concentración del club oficial de Harley Davidson o la Federación de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas. Todos pueden esperar algo de la generosidad del presidente. Carlos Fabra no sólo es el Gran Conseguidor; es también el Gran Benefactor.
Fabra ha tenido la habilidad de adaptar este sistema clientelar a la política actual para conseguir actuar como un cacique dentro de un sistema democrático de partidos. Ése ha sido su éxito hasta el momento y quizá el origen de su declive. Dotado de don de gentes, de una extraordinaria memoria y de una capacidad de trabajo sobresaliente, ha tejido una red impenetrable en Castellón que no escapa a su dominio y que envuelve al propio Partido Popular. Todos cuantos intentos hicieron tanto Eduardo Zaplana como, actualmente, Francisco Camps para infiltrar gente afín en cargos de la provincia han fracasado, de manera que Fabra se ha convertido en elemento decisivo para inclinar cualquier balanza en la lucha por el poder en la Generalitat valenciana. El caso más reciente se ha vivido durante la precampaña de Mariano Rajoy para ganar adeptos en su candidatura a la presidencia del partido. Fabra estuvo callado durante unos meses, no se postuló ni a favor de Rajoy ni de las tesis de Esperanza Aguirre. Sólo cuando vio el panorama más claro tomó posición por el primero, y lo hizo afirmando que no tenía dudas al respecto. "Lo mejor que se puede hacer por el partido es avalar la candidatura de Mariano Rajoy", dijo, días después de afirmar con rotundidad: "Yo soy de Fabra". A cambio de esa posición de fiel de la balanza, Fabra ha tenido otra habilidad: nunca ha pretendido salir de los límites de su provincia, posiblemente consciente de que sus métodos no podían ser exportables. Con razón sus nietas le llaman Carlitos de Castellón y sus adeptos proclaman que nadie ha traído tanta prosperidad como él.
Fabra elabora personalmente las listas electorales de cada municipio. Su memoria le permite no olvidar ningún nombre, ningún rostro, por tanto, ningún favor anterior que deba ser compensado. Organizado territorialmente Castellón en pequeños partidos judiciales, Fabra es consciente de la importancia que pueden tener unos cuantos votos en poblaciones del interior. Es quien da las consignas en tiempo electoral. Sin ir más lejos, en las últimas elecciones se ha detectado un incremento injustificado del censo electoral en algunas localidades: casas deshabitadas en las que figuraba gente empadronada, hoteles rurales ocupados por varias familias, vecinos que nunca habían visitado su supuesto domicilio: hay al menos media docena de causas abiertas por un posible delito electoral. El resultado de todo ello es que ha convertido Castellón en un fortín inexpugnable bajo su dominio.
Llegó a la presidencia de la Diputación de Castellón en 1995. Ése fue su objetivo desde que comenzó a militar en Alianza Popular, donde se enfrentó al aparato del partido hasta conseguir hacerse con la dirección del mismo. Una vez asentado como cabeza visible del PP en Castellón, pasó dos legislaturas en la oposición, tiempo en el que se dedicó, principalmente, a sus trabajos como secretario de la Cámara de Comercio y como agente de seguros. Durante ese periodo fijó para su carrera un único objetivo: la presidencia de la Diputación. Curiosamente, no aspiró a ningún otro cargo institucional. Se ha limitado a obtener un puesto de concejal, paso previo para que la aritmética electoral de la provincia le permitiera ser elegido presidente exclusivamente con los votos de los diputados provinciales. Actuó entre bastidores con gran eficacia y eso explica que nunca tuviera la más mínima intención de someterse al escrutinio popular, a pesar de su don de gentes.
Porque simpatía nadie le niega, ni siquiera sus más encarnizados rivales. Cuando Carlos Fabra se convierte en Charly, sus modales se transforman. Charly es un hombre extravertido. Divertido. Ocurrente. Juerguista. Jugador. Un brillante contador de chistes. Dice la leyenda popular que nadie ha visto reírse tanto a Ana Botella como cuando compartía mesa con Fabra durante las estancias vacacionales de la familia Aznar en Castellón. Le gusta la buena comida acompañada de Don Perignon, el whisky con Coca-Cola para alternar y, por supuesto, cantar en italiano.
Esta parte menos conocida de su personalidad se fraguó durante la adolescencia, periodo en el que no fue un buen estudiante. "Cuando tuvo ese accidente en el ojo siendo un chaval, otros hubieran reaccionado de una manera diferente. Él se echó p'alante", recuerda una de sus amigas. Lejos de convertirse en un joven retraído, Carlos Fabra era el amo de cualquier fiesta. Estudió Derecho en Valencia y Granada. Era también un hombre con suerte.
Mucho se ha especulado con los tres premios de la lotería que le han tocado en estos años. El último, las pasadas navidades: ganó dos millones de euros por el gordo del sorteo del Niño. La justicia determinará si fueron "reales" o "fabricados", pero es famosa su afición al juego. No es tan conocido que ya le tocó una quiniela durante su juventud. "No me acuerdo de la cifra. Pero era una cantidad importante para el año 1968. Y se compró un Mini a los dos días. Tal y como es Carlos, se gastaría el dinero en poco tiempo", comenta una amiga de la juventud.
Carlos es de los que viven al límite. Se levanta muy temprano y se acuesta muy tarde. Alterna el acto oficial con la cena entre amigos. No descarta cualquier fiesta. Es desprendido con el dinero. "Cuando lo tiene y cuando no lo tiene", confirman sus amistades. "Estoy convencido de que nunca ha mirado el extracto de su cuenta bancaria", dice un amigo personal.
Sin embargo, son sus cuentas bancarias las que pueden acabar con su carrera política, según cómo concluya un proceso judicial que puede ser calificado de chocante a la vista de algunos aspectos: iniciado como una denuncia en el juzgado número 1 de Nules en el año 2003, se han sucedido en su instrucción un total de ocho jueces y cuatro fiscales. El proceso ha puesto de manifiesto, según los datos que obran en las diligencias, numerosas irregularidades en sus cuentas personales. Durante 1999 se registran en sus cuentas ingresos en efectivo por un importe cercano a los 600.000 euros cuya procedencia Fabra no pudo justificar ante la Agencia Tributaria, por lo que el organismo presentó contra él una denuncia por delito fiscal. Los ingresos en efectivo se realizaron en 19 cuentas bancarias en las que Fabra era titular y en otras 75 en las que figuraba como autorizado. Con la declaración de la renta que presentó a Hacienda en 1999, el erario público le devolvió cerca de 3.000 euros. Una declaración que resultó negativa tras haber declarado cerca de 73.000 euros como ingresos del ejercicio.
Carlos Fabra y su esposa gastaron en 2004 el doble en amortizar préstamos de lo que declararon a Hacienda haber ingresado. Fabra pagó un total de 131.000 euros como amortización de dos créditos hipotecarios que tenía vigentes. Sin embargo, según la documentación fiscal que obra en poder del juzgado de instrucción número 1 de Nules, sus ingresos declarados ascendieron a 100.621 euros, teniendo en cuenta su sueldo como cargo público y los valores que entonces poseía y de los que extraía rendimientos. Además, la documentación que la policía judicial y los peritos han recopilado en los bancos durante los últimos días desvela la existencia, entre 1999 y 2004, de seis millones de euros sin justificar.
El caso tiene su origen en un asunto donde se mezclan las relaciones personales y el sistema de favores. Diríase que el Gran Conseguidor fue traicionado. Vicente Vilar y su esposa, Monserrat Vives, formaban parte del círculo privado de Fabra. Las respectivas mujeres llegaron a ser socias en la mercantil Artemis 2000. Vilar tenía una empresa de productos fitosanitarios, Naranjax, y le pidió a Fabra que acelerara la concesión de autorizaciones para su distribución a través de sus amistades en los ministerios de Agricultura y Sanidad durante el Gobierno de Aznar. Los documentos que forman parte de la instrucción demuestran cómo no sólo Carlos Fabra, sino más diputados y senadores populares, se interesaron por la situación en la que se encontraban las autorizaciones de Vilar. Presuntamente, Vilar pagó algunas cantidades a Fabra por dichos favores. El "negocio" se rompió a causa de las desavenencias conyugales de la pareja Vilar. Su mujer le denunció por violación y Fabra la apoyó. La venganza de Vilar se convirtió en una denuncia: llevó documentos al juzgado y contó detalles de las gestiones realizadas. El caso sigue abierto desde entonces y ha colocado a Fabra ante la opinión pública española.
A partir de ese momento, su carrera política está tocada. Bien es cierto que su poder no ha mermado y que, electoralmente, el Partido Popular no ha sufrido mella en Castellón. A pesar del acoso judicial, Rajoy llegó a salir en su defensa este verano. "Es un ciudadano y político ejemplar", manifestó. Pero el comportamiento público de Fabra ha tomado otra orientación. Se muestra crispado, responde con chulería, llega al insulto (como el "qué hijo de puta" que profirió en un pleno reciente en supuesta referencia al portavoz de la oposición), y se comporta como si fuera inmune al proceso judicial y no tuviera que dar cuentas de sus actos a nadie, ni siquiera a su propio partido.
Su vida personal también ha cambiado. Se separó de su mujer, María Amparo Fernández, procedente de una familia adinerada de Alcoi, y mantiene una relación sentimental con Esther Pallardó (su anterior jefa de prensa y actual concejal y diputada provincial), una mujer casi treinta años más joven que ejerce una notable influencia sobre el presidente, según sus allegados. El nuevo Fabra ya no es tan bien visto en su círculo de amistades, que observa con preocupación cómo su ritmo de vida, tan al límite, no augura un buen desenlace.
Tiene pánico al avión y ni siquiera el hecho de que uno de sus hijos sea piloto ha contribuido a curarle esta fobia, así que se desplaza exclusivamente en automóvil. No le importa: es incansable, puede con todo, tanto si se traslada a una capital para presenciar una corrida de toros (su gran afición) como si deleita a sus amistades en la caseta que paga, junto a destacados empresarios de Castellón, en la Feria de Sevilla. Claro está, Don Carlos nunca deja abandonados a los suyos: los servicios de limpieza de buena parte de las instituciones de la provincia han sido concedidos a la empresa de un ex torero de Castellón.
No deja atrás ningún detalle. Le gusta regalar flores a las mujeres por su cumpleaños y agasajar a sus invitados en una fiesta. En una ocasión se las ingenió para contratar a un cantante italiano. El hombre tenía un doble compromiso en su contrato, una actuación cara al público y otra de carácter privado.
Y en ese otro escenario reducido, entre risas y alcohol, el hombre de las gafas oscuras, Don Carlos, el Presidente, el Gran Conseguidor, se convirtió de nuevo en Charly y no eludió interpretar un dúo. Tomó entonces el micro y cantó:
-... ciao, ciao, bambina... un bacio ancora... e poi per sempre ti perderó... -

viernes, 3 de octubre de 2008

TSJCV adopta medidas para llamar a los jueces sustitutos adscritos a los juzgados de Nules

VALENCIA, 3 Oct. (EUROPA PRESS)

La Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha comunicado al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que ha adoptado las previsiones necesarias para el "inmediato llamamiento" de los jueces sustitutos destinados a los juzgados 'bis' de Nules (Castellón), localidad donde se instruye la causa en la que está imputado el presidente de la Diputación castellonense, Carlos Fabra, y pide a la Conselleria de Justicia que le comunique cuándo tendrán estos órganos los medios materiales y personales necesarios para hacer operativa esta medida de refuerzo.
En un acuerdo adoptado por unanimidad de los miembros de la Comisión de la Sala de Gobierno del TSJCV asistentes a una reunión reciente, este órgano tomó conocimiento de la comunicación del CGPJ de 19 de septiembre de 2008 por el que les informa "de la autorización a efectos económicos" del Ministerio de Justicia, "del llamamiento en adscripción de dos jueces sustitutos, para los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción número 1 bis y 2 bis de Nules (Castellón) aprobado por acuerdo de 11 de septiembre de 2008 de la Comisión Permanente" del órgano de Gobierno de los jueces.
La Sala de Gobierno ha acordado comunicar al CGPJ que se han adoptado "las previsiones necesarias para el inmediato llamamiento de los jueces sustitutos que habrán de quedar adscritos a los citados juzgados, tan pronto sean dotados éstos de los medios materiales y personales precisos para hacer operativa la medida de refuerzo acordada".
Asimismo, supeditada a esa dotación, "igualmente se han adoptado las medidas oportunas en lo que respecta al nombramiento de los Secretarios Judiciales Sustitutos, que habrán de atender el refuerzo de que se trata conforme a la autorización concedida por la Dirección General de Modernización y Secretaría General de la Administración de Justicia del Ministerio de Justicia".
Ante esta situación, se pide a la Dirección General de Justicia y Menor de la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas de la Generalitat Valenciana que comunique a la Sala de Gobierno la "fecha en que los juzgados de primera instancia e instrucción números 1 bis y 2 bis de Nules contarán con los medios materiales y personales necesarios para la efectividad de la medida".
La Sala de Gobierno indica que se puede hacer bien con el nombramiento en régimen de interinidad de un funcionario del Cuerpo de Gestión Procesal y Administrativa y dos funcionarios del Cuerpo de Tramitación Procesal y Administrativa para cada uno de los Juzgados bis números 1 y 2 de Nules, --como señalaba el acuerdo del CGPJ-- o con "otras fórmulas" como prolongaciones de jornada, "para que por personal al servicio de la Administración de Justicia se preste la debida colaboración y asistencia a los Jueces y Secretarios Sustitutos que en definitiva sean llamados a esos Juzgados".

jueves, 2 de octubre de 2008

El TSJ nombrará en dos semanas los jueces de refuerzo para impulsar el caso Fabra - Levante EMV

J. Antequera, Castelló
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) nombrará en unas dos semanas a los dos jueces de refuerzo que deben impulsar la investigación del caso Fabra en los juzgados de Nules. Las plazas de jueces 1 bis y 2 bis han sido creadas por el Poder Judicial y tendrán que ir acompañadas de una plantilla de funcionarios -al menos seis por cada juzgado- pero éstos no llegarán hasta el próximo año, ya que el Consell ha alegado problemas presupuestarios para su contratación. De esta manera, aunque el TSJ nombre a los jueces recurriendo a su bolsa de sustitutos, será prácticamente imposible que el caso Fabra avance de forma sustancial antes de 2009.
Los jueces serán elegidos por riguroso orden de lista y si alguno de ellos renuncia perderá sus derechos en la bolsa de trabajo para jueces sustitutos. "De esta forma se garantiza el principio de juez predeterminado por la ley", explican las fuentes del TSJCV.
El caso Fabra acumula ya 20.000 folios de expediente desde su apertura a finales del año 2003. Desde entonces han pasado ocho jueces por el juzgado número 1 y al menos dos más por el 2.
Por otro lado, el BOE publicó el pasado martes que el Consejo General del Poder Judicial ha sacado a concurso, por tercera vez en un año, la plaza de jueces titulares para ambos juzgados. En las otras dos ocasiones el concurso quedó desierto por falta de candidatos, ya que ningún magistrado quiso ir a estos órganos judiciales, que investigan al presidente del PP y de la Diputación de Castelló por delitos contra la Administración Pública y fraude fiscal.
Por otra parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de Vega, acusó ayer a los responsables del PP de la Comunitat de que "mientras todos se aprietan el cinturón no son capaces de presentar sistemas de control de cuentas. Y mientras tanto, la Justicia investiga las cuentas de algunos de sus ciudadanos ejemplares", ironizó De la Vega tomando un reciente comentario que Rajoy hizo del presidente de la diputación de Castelló, Carlos Fabra.

De la Vega lamenta que se investiguen cuentas millonarias de Fabra mientras otros sufren la crisis

Levante de Castelló, Castelló
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de Vega, acusó ayer a los responsables del PP de la Comunitat Valenciana de que "mientras todos se aprietan el cinturón no son capaces de presentar sistemas de control de cuentas. Y mientras tanto, la Justicia investiga las cuentas de algunos de sus ciudadanos ejemplares", ironizó De la Vega tomando un reciente comentario que Rajoy hizo del presidente de la diputación de Castelló, Carlos Fabra.
La vicepresidenta, que realizó estas manifestaciones durante la sesión de control al Gobierno, acusó al Partido Popular de tener las ideas "congeladas" en materia económica y le advirtió de que sus "falsos argumentos" son "un auténtico recorte a la inteligencia".
Cabe recordar que el pasado lunes otra dirigente nacional, esta vez la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, tuvo que referirse al caso Fabra al ser requerida por los periodistas. De Cospedal fue preguntada por si la dirección nacional del PP piensa abrir al menos "un expediente informativo" a Carlos Fabra para averiguar qué hay de cierto en las acusaciones que pesan sobre él. Pero De Cospedal, visiblemente incómoda, se zafó de la pregunta apelando a "la presunción de inocencia" del presidente de la Diputación de Castelló -imputado en varios delitos contra la Administración Pública y fraude fiscal-. La secretaria popular lamentó ademas "las filtraciones" que se están dando del sumario.
De Cospedal pasó la patata caliente a la dirección del PP valenciano alegando que es quien debe tomar una determinación. Junto a ella se encontraba el secretario de Comunicación del partido, Esteban González Pons, diputado por Valencia.
Cuando acabó la rueda de prensa, los periodistas insistieron en el tema, está vez preguntando directamente al propio González Pons. Pero éste sonrió y sin abrir la boca señaló con el dedo a Cospedal para que respondiera ella.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Colomer pide a Fabra que dimita porque las dudas sobre sus cuentas lo deslegitiman. Levante-EMV.com

El portavoz socialista, Francesc Colomer, pidió ayer en un salón de plenos abarrotado la dimisión del presidente de la Diputación de Castelló, Carlos Fabra, ante la gravedad de que lleve 5 años imputado por los "delitos más graves que se le pueden imputar a un cargo público". Delitos contra la Administración: "tráfico de influencias, cohecho, uso de información privilegiada o malversaciones de fondos públicos". Por ello le interpeló buscando aclaraciones a los últimos acontecimientos en el "caso Fabra" con la irrupción de la policía con peritos de Hacienda en varios bancos de Castelló para obtener datos de las cuentas del presidente del PP provincial. Ante el silencio de Fabra fue el vicepresidente Vicente Aparici quien replicó a Colomer al que instó a dimitir por "difamar" y vivir de "montajes mediáticos".
Colomer afirmó que ante la falta de respuesta de Fabra a las preguntas sobre sus cuentas bancarias "no puede permanecer al frente de la institución ni un minuto más, puesto que no tiene legitimidad". Y le preguntó si "le parece normal no contestar a preguntas tan elementales en vivo y en directo" Este debate entre Colomer y Aparici se produjo al defender el primero la urgencia de tratar su propuesta de instar al Consell a dotar de funcionarios y medios a los dos jueces de refuerzo que el Gobierno y el Consejo General del Poder Judicial han aprobado para Nules para "desatascar" los procesos ralentizados, entre los que se cuentan dos que afectan a Fabra y que "generan alarma social", apunta Colomer. La moción no fue debatida, lo que justificó Aparici porque el PSPV presentó otra similar en julio y que fue enmendada por el PP, que la aprobó con la abstención socialista.
Aparici aprovechó para pedirle a Colomer que dimitiera (por la tarde en un comunicado el PP volvió a reiterar esa petición) por basar su oposición en mentiras" y "montar circos" por ello, "si tuviera un mínimo de decencia se iría a su casa", porque, y apeló al recurrente, "ni en su partido le apoyan" . Cerró su intervención pidiéndole "prudencia" y "calma", porque "por el camino de la difamación y la mentira va mal". Ahondó en que la moción "forma parte del circo" que "han montando ustedes imputando al presidente cuentas ajenas, de otras entidades" de las que forma parte.
Colomer lamentó la ocasión perdida por Fabra para agilizar un caso "cuyo retraso dice que tanto le perjudica". Tampoco prosperó la moción socialista para que la diputación recortase el número de asesores de presidencia al tiempo que una congelación de los sueldos y dietas de diputados, asesores y eventuales, dando ejemplo en tiempo de crisis.
Sueldos congelados
El socialista justificó la medida por la falta de conocimiento de las funciones que ejecutan y los resultados obtenidos a la par de las indicaciones del propio Rajoy.
Aparici indicó que Fabra había dado órdenes de congelar los sueldos, pero que el número de asesores no iba a variar y que eran muchos menos que los más de 600 de Zapatero. Además, "suponen el 0,90% del presupuesto".
Colomer en base a esos datos y el tamaño de la población dijo que en proporción, "el área de Presidencia de la diputación debía de tener 8 y no 34 asesores".